Adolescentes, jóvenes y los riesgos.
Introducción y “Manifiesto de Intenciones”:
Frecuentemente los términos adolescencia y adolescente se identifican y definen como un periodo y un sujeto “turbulento y conflictivo”, y aunque cierto y con suficiente evidencia que esta etapa evolutiva supone un “aumento de conflictos”, (sobretodo con los padres) de inestabilidad emocional y de conductas de riesgo, no es menos cierto también que es un ciclo vital de descubrimiento, de experimentación, de búsqueda y encuentro, de aumento de las competencias personales, de optimismo, de expectativas de futuro o relaciones significativas, en definitiva, una etapa de OPORTUNIDAD y OPORTUNIDADES .
(…) estamos muy acostumbrados a ver la adolescencia como un problema, pero cuanto más sabemos de ella, más nos parece una fase funcional y adaptativa. Exactamente lo que hace falta en ese momento de la vida.
B. J.Casey, cita Pág. 17 del libro “El talento de los adolescentes” – Jose A. Marina
Esta consideración de la adolescencia como oportunidad, además de huir “de una visión fundamentalmente problemática”, supone situar esos conflictos, determinados comportamientos adolescentes y los riesgos, como elementos adaptativos y posibilidades para el desarrollo de los adolescentes.
(…) frente a la concepción de la asunción de riesgos como un problema, especialmente durante la adolescencia, tendríamos que admitir la idea del riesgo como una oportunidad para el desarrollo y el crecimiento personal (Lihtfoot, 1997) (…) Es posible que una actitud adolescente conservadora y de evitación de riesgos esté asociada a una menor incidencia de algunos problemas comportamentales y de salud, sin embargo, también es bastante probable que esa actitud tan precavida conlleve un desarrollo deficitario de algunas áreas como el logro de la identidad personal, la creatividad, la iniciativa personal, la tolerancia ante el estrés o las estrategias de afrontamiento.
“La adolescencia como riesgo y oportunidad”. Alfredo Oliva. Universidad de Sevilla. Infancia Y aprendizaje, 2004, 27 (1), 115-122
Con esta mirada, asumimos y consideramos los conflictos y los riesgos como retos y tareas a las que los adolescentes en su proceso de crecimiento se enfrentan (optando, decidiendo, eligiendo) y van asumiendo compromisos que los ayudarán a ir paso a paso construyendo su identidad personal y a iniciar una determinada trayectoria personal. La perspectiva no es pues evitar el conflicto o los riesgos, si no aprender a gestionarlos de una manera solvente y competente.
¿Y con las drogas qué?…
Casi siempre que se habla de riesgos y/o comportamientos de riesgo en la adolescencia, aparece el consumo de “drogas”. Y es, en ocasiones también, uno de esos retos antes los que el adolescente debe tomar una decisión: ¿qué hago, fumo o no fumo? ¿se enterarán mis padres? ¿qué pasará? … Y si no fumo o bebo ¿qué pensarán mis amigos?,…
Pero hay que dejar claro algunas cosas:
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cuando hablamos de drogas y adolescencia hablamos fundamentalmente del tabaco, el alcohol y el cannabis (marihuana, polen, chocolate,….)
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según los últimos datos, “tenemos una adolescencia tranquila en relación con los consumos de drogas”.
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para hablar de drogas y adolescentes es necesario hablar de “formas de relacionarse con las drogas” porque existen diferentes maneras (adolescentes) de relacionarse con ellas:
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la abstinencia (a pesar de lo que pueda pensarse la mayoría de los chavales no consumen drogas)
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la experimentación: contacto puntual con la sustancia (“a ver qué pasa”) (…) “Si no te equivocas no aprendes”
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el uso: habitual, puntual,… Existe una finalidad en el consumo (divertirme, dormir, relajarme, relacionarme con otros, ligar, porque “estoy rallao con mis padres”, etc (…) “Quizás no son buenas, pero a mí me gustan” (…) “No serán buenas pero son útiles para no pensar en los problemas”
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Abuso: cuando por la frecuencia, el tipo de sustancia o la cantidad, no puedo dejar de consumir y me crea problemas en los estudios, legales, en la relación con mis padres, abandono de actividades que antes disfrutaba, etc. (…) “Lo malo es cuando te das cuenta que toda tu vida gira alrededor de la marihuana”.
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… También existen los riesgos. Pero ¿De qué riesgos hablamos?:
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Que el consumo afecte a las relaciones de los adolescentes: con su familia, con sus iguales, con su entorno, … Ojo también con los riesgos legales.
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Que afecte a su productividad: estar “empanao”, lento, no tener ganas de estudiar, dificultades para rendir en el trabajo, no tener la mente ágil cuando lo necesita,…
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Que les limite o impida hacer cosas de las que podría disfrutar: medir y evaluar si un plan es mejor o peor en función de si se puede fumar o no (…) Ponerse nervioso si no puede fumar en determinadas situaciones (en unas vacaciones con tus padres, un evento, …)
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Cuando el consumo está afectando a la memoria, se olvidan cosas con mayor frecuencia, cuesta seguir el hilo de las cosas,…
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Estar más cansado de la cuenta, más desganado y apático. No hacer nada.
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Saltarse “las propias reglas” o límites: no conducir, no ir fumados al curro o al insti, no fumar cuando “salimos por ahí con los padres o tenemos alguna historia familiar, ….. Pero podemos acabar haciendo alguna excepción: “son sólo un par de kilómetros”, “es viernes y salgo antes”, “no se van a dar cuenta”… Si te habías impuesto esas reglas, es por algo; el hecho de saltártelas pude implicar se está perdiendo el control.
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Se lleve el cien por cien de los gastos o la gran mayoría de ellos
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Que no “coloque” (me ponga morao) todo lo que gustaría. Es una paradoja: fumar más no aumenta el placer, sólo aumenta la tolerancia (fumar cada vez más para conseguir los mismos efectos)
Nuestra propuesta: Acompañar vidas adolescentes para que no se compliquen. O cómo también plantea Jaume Funes Arteaga, “(…) educar a los adolescentes para que gestionen de una manera razonada y razonable sus relaciones con las drogas.”
Hacemos nuestro el título de una ponencia y contenidos de diferentes artículos de Jordi Bernabéu Farrús, psicólogo y educador, para proponer cómo intervenir o más bien, desde dónde situar las intervenciones con los adolescentes y sus relaciones con las drogas.
En primer lugar repensar qué significa prevenir. No es sólo evitar el consumo, fomentar la abstinencia, si no potenciar la responsabilidad, la toma de decisiones, la autonomía. Y evitarse problemas (…)
En segundo lugar, necesitan personas adultas que los acompañen, que confíen en la eficacia y competencia de sus recursos (…) Para influir en la vida de alguien antes debes haberte convertido útil y referente para éste.
Y en tercer lugar, tener presente que detrás de muchos consumos problemáticos se esconden otros problemas: de relaciones, (con uno mismo, con la familia y sociales) de falta de expectativas, de frustraciones, …. Y olvidarnos a menudo del papel del consumo.
Se trata en definitiva de ofrecer respuestas que tengan como finalidad responsabilizar al adolescente hacia el tema de las drogas u otras cuestiones de su vida, y a la vez, acompañarlo en su proceso de desarrollo (…) promoviendo su responsabilidad y autonomía. Como planteábamos más arriba, la perspectiva no es evitar el conflicto o los riesgos, si no aprender (acompañar a los adolescentes) a gestionarlos de una manera solvente y competente.
Ana Mª Anguita Parrado (Psicóloga de la UDA – IPBS)
Inmaculada León Ezqueta (Educadora Social de la UDA – IPBS)
Manuel (Yayo) Cazallo Muñoz (Educador Social de la UDA – IPBS)
Referencias bibliográficas
Alfredo Oliva apunta y habla de un nuevo modelo de desarrollo positivo adolescente, y el ya citado J.A. Marina “del nuevo paradigma de la adolescencia.
Autores como Jaume Funes o Jordi Bernabéu, hacen hincapié en la necesidad de plantearnos como miramos a los adolescentes y cambiar la mirada que tenemos hacia ellos..
Por ser una droga ilegal, (frente a alcohol y tabaco) su significación en el universo adolescente y “las señales de alarma” que lanza en padres y profesionales, nos referiremos al consumo de Marihuana.
“Si los consumos de drogas evolucionan positivamente, habrá que alegrarse ¿no?” Juan Carlos Melero, junio 2017 – lasdrogas.info
Jaume Funes es educador, psicólogo y periodista. Referente en muchos de nuestros planteamientos.
Alfredo Oliva apunta y habla de un nuevo modelo de desarrollo positivo adolescente, y el ya citado J.A. Marina “del nuevo paradigma de la adolescencia.
Autores como Jaume Funes o Jordi Bernabéu, hacen hincapié en la necesidad de plantearnos como miramos a los adolescentes y cambiar la mirada que tenemos hacia ellos..
Por ser una droga ilegal, (frente a alcohol y tabaco) su significación en el universo adolescente y “las señales de alarma” que lanza en padres y profesionales, nos referiremos al consumo de Marihuana.
“Si los consumos de drogas evolucionan positivamente, habrá que alegrarse ¿no?” Juan Carlos Melero, junio 2017 – lasdrogas.info
Jaume Funes es educador, psicólogo y periodista. Referente en muchos de nuestros planteamientos.
“El acompañamiento socioeducativo a adolescentes consumidores de cannabis en tiempos de crisis”
“Y si fuman porros qué. La acción educativa y preventiva ante adolescentes consumidores de cannabis” – “Porros y señales de humo”