Definir la vocación
Cualquier persona, tenga la edad que tenga, necesita saber para qué sirve y cómo puede ser más feliz. Si quieres definir tu vocación debes analizar cuáles son tus actitudes, tus fortalezas y tus intereses profesionales, sin olvidar que ésta es una decisión que puede condicionar, en parte, tu vida.
Qué es la vocación
El Diccionario de la Real Academia define “vocación” como una “inclinación a cualquier estado, profesión o carrera”; sin embargo, por “vocación” entendemos una disposición para un estado personal, que se concreta profesional o socialmente. El problema es que esto último no siempre es así, ya que deben tenerse en cuenta otras posibilidades, puesto que la vocación se extiende a lo largo de toda la vida.
La vocación tiene que ver con quién eres y quieres ser como persona, y sólo desde ahí, se refiere al camino que eliges para concretar esa forma de vida en una carrera o trabajo.
La vocación es importante
Al elegir una carrera hay varios factores que se deben considerar. Por un lado, tus intereses y capacidades, y por otro, las perspectivas laborales de la carrera después de la titulación. Es decir, debes tener en cuenta los siguientes aspectos:
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La “voz” (atracción hacia algo, lo que nos llama la atención) que nos dice desde dentro, y a veces también desde el entorno, que hay algo que es importante y a lo que podemos aportar “nuestro grano de arena”. Reflexionar sobre lo que consideras valioso, en qué problema o desafío de la sociedad te gustaría aportar es un camino para encontrarla.
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La fuerza interior o energía que te impulsa en una dirección. Es la que te hace ser constante en el estudio, dedicarle tiempo y explica por qué ciertas asignaturas te gustan más que otras. Para descubrirla piensa en lo que te gusta hacer, a qué dedicas tiempo cuando puedes decidir.
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La carrera o trabajo específico en que se traduce tu vocación.
Y… ¿cómo puedo saber cuál es mi vocación?
Decidir qué es lo que realmente te gusta no es siempre fácil. Actualmente, resulta difícil optar por una actividad en particular porque el mercado laboral es muy inestable y cambiante. Por tanto, necesitarás realizar un análisis más exhaustivo acerca de las ventajas y/o desventajas de cada profesión.
Sin embargo, y aunque pensemos lo contrario, llegar a conocer qué es lo que te gusta y en qué eres bueno o buena no es suficiente para definir tu vocación profesional. Además, necesitas conocer cuáles son tus principales valores profesionales, es decir, saber identificar qué es importante para ti en tu trabajo diario: el horario de trabajo, el sueldo que puedes llegar a conseguir, el reconocimiento social, luchar por el beneficio de otras personas de forma desinteresada (es lo que se conoce por altruismo)… Además, en la búsqueda de la profesión influyen otras variables como las oportunidades laborales en el sector elegido, la retribución media o la posibilidad de crecimiento y proyección dentro de esa área o profesión concreta.
Por último, también tendrás que tener en cuenta el sentido último de tu trabajo, es decir, si en tu situación laboral estás consiguiendo satisfacción y realización, más allá de la compensación económica que obtengas (ten en cuenta que gran parte de nuestra vida transcurre dedicada al trabajo, con jornadas de ocho horas diarias como mínimo… por lo que orientarnos a una actividad que nos proporcione satisfacción, constituirá una de las mayores aportaciones para incrementar nuestro nivel de bienestar general).
Mª Victoria Benítez Roca
Orientadora IES Villarrubia